lunes, 31 de diciembre de 2007

Raúl San Martín Sanz

Tanto la idea de cruzar como la logística fue de Raúl. Fue nuestro San Martín del cruce. Un amigo de él, puso en este blog que era un cabeza dura y todo lo que se proponía no hacía. Y fue así, la cabeza más grande del mundo (como le llamo), preparó la hoja de ruta con fotos, paradas, alimentación, tiempos de descansos, absolutamente todo previsto. Como buen cardíologo nos hizo ergonometrías, cuidó de nuestra salud y por poco no se lleva una ambulancia al lado como nos dijo Ale Farina. Fue un engranaje importante para llevar a cabo el desafío y lo cumplimos gracias a él.